El tratamiento antirreflejante es uno de los más recomendables ya que evita el deslumbramiento. Reduce la cantidad de luz que llega a los ojos, elimina los indeseables reflejos y previene el cansancio visual.
Cada vez resulta más habitual que, debido a un intenso trabajo en visión de cerca o con ordenadores, muchas personas acudan a los establecimientos sanitarios de óptica en busca de soluciones para su cansancio visual. Los síntomas suelen ser picor de ojos, escozor, lagrimeo,…
Otras se sienten incómodas cuando llevan sus gafas al aire libre o en lugares con mucha iluminación debido a los reflejos producidos por la luz al incidir sobre la superficie de las lentes. La solución en la mayoría de los casos es utilizar unas lentes que cuenten, entre otros tratamientos, con un antirreflejante.
Sin brillos
Para lograr comodidad y nitidez visual evitando deslumbramientos, debemos siempre añadir un tratamiento antirreflejante. Este filtro facilitará que estas sean casi invisibles cunado la luz incida sobre ellas luces de vehículos, de ordenadores…
No solo una cuestión estética
Por otro lado la solución al problema estético de los reflejos, también es un tratamiento antirreflejante. Este permite que las lentes lleguen a una transparencia de hasta un 99%. Además no solo la estética mejora, sino que la calidad de visión y el rendimiento visual también mejoran notablemente.
Sirve para cualquier tipo de lente
El tratamiento antirreflejante es idóneo en cualquier tipo de lente orgánica, independientemente de la graduación que necesite.
- Si pasamos mucho tiempo en la oficina, un antirreflejante es ideal, ya que desvía las luces demasiado oblicuas o intensas y logra que veamos mejor los objetos directos. Es como no tener la lente delante.
- Cuando trabajamos muchas horas con ordenadores, el tratamiento antirreflejante es obligatorio para prevenir en gran medida el denominado ‘síndrome visual informático’.
- Si salimos al exterior en días soleados o estamos en lugares con iluminación artificial intensa (campos deportivos, escenarios, platós de televisión, discotecas…) el antirreflejante logrará que nos olvidemos de las gafas.
- Conduciendo por la noche, si llevamos un antirreflejante en nuestras lentes, las luces de los coches que circulan de frente a nosotros no nos molestarán. Por lo tanto, las lentes con tratamientos antirreflejantes son una muy buena solución en cualquier situación o actividad.
Acude al óptico-optometrista
Si tienes problemas visuales cuando trabajas con el ordenador, leyendo o realizando tareas en visión próxima, acude a tu óptico-optometrista para que te realice un estudio completo de la visión para comprobar que tu sistema visual trabaja de forma eficiente y, si es así, la prescripción de un buen tratamiento antirreflejante será la mejor opción.